miércoles, 24 de mayo de 2017

Esquivando charcos. Las Cuencas Metropolitanas

Las Cuencas Metropolitanas

Si tuviésemos que expresarlo de alguna manera figurativa, podríamos decir que la mayoría de las personas de este país, pisa agua. Es decir, gran parte de la población reside en las cuencas metropolitanas de CABA y el conurbano bonaerense.


Lo que denominamos Cuencas Metropolitanas, son las 12 cuencas que se sitúan, como dijimos, en AMBA, más algunos partidos bonaerenses al sur y al oeste de la capital. Estas cuencas alcanzan algo menos de 9.000 km2 de superficie. Representan menos del 3% de la superficie de la provincia de Buenos Aires y CABA.
Las cuencas metropolitanas, son Radio Antiguo, Vega, Erezcano, Ochoa, Maldonado, Boca/Barracas, Cildañez, Medrano, Del Plata (Sur), Matanza-Riachuelo, Reconquista y Luján.


Sin embargo, en ellas residen el 85% de la población de estas dos jurisdicciones
Como expusimos en posteos anteriores, en las cuencas metropolitanas se materializan todos los fenómenos urbanos que ya hemos trabajado en este sitio: la distribución demográfica, la hiper densidad poblacional, la contaminación de los arroyos y las cuencas, la deficiente infraestructura sanitaria, la pobreza y las inundaciones.


Resultaría poco sensato analizar las condiciones antes expuestas, en todas las cuencas metropolitanas. La razón es sencilla: en ellas viven la totalidad de las personas del AMBA y las diferencias que podríamos encontrar en otras divisiones geográficas, se perderían.
En todo caso, sí es importante conocer las cuencas metropolitanas como también lo que supone que dentro de las mismas se desarrolle el fenómeno urbano, demográfico y productivo más importante (y caótico) de Argentina. 
Qué supone que, en un territorio plagado de cuencas, exista esta trama urbana? Decididamente, la modificación del entorno natural, impacta en el equilibrio hídrico que existe en las cuencas. Al modificarse los cursos naturales de recorrido hacia el Río de la Plata y, mediante la edificación descontrolada, la capacidad de absorción genera una menor tolerancia superficial ante períodos de lluvia.
En síntesis, empezamos a escuchar con mayor frecuencia de zonas que se inundan. Sin entrar en galimatías de cambio climático, hoy, el manejo de las inundaciones en las cuencas metropolitanas, es un problema de índole gubernamental.


Las cuencas engloban a 15 millones de personas. 5 de ellas corresponden exclusivamente a CABA y las restantes comparten jurisdicción o son exclusivas de la provincia de Buenos Aires. 
La densidad poblacional de algunas (las de CABA principalmente) es altísima. Las cuencas de Radio Antiguo, Vega, Erezcano y Maldonado, van de 26 mil a 18 mil personas por km2. Como también hay cuencas como la Del Plata, Matanza - Riachauelo o Reconquista, donde viven entre 2 a 4 millones de personas.


Cuando encaramos el tema de las cuencas metropolitanas, vamos descubriendo que en cada cuenca existen problemáticas puntuales pero también comunes, como antecedentes de inundaciones cada vez más recurrentes, modificaciones sustanciales de la estructura urbana acelerada en los últimos años, así como signos notorios de obsolescencia en las redes hídricas y corredores.
Si algo recogemos como conclusiones de estos estudios, es la recomendación de una urbanización algo más racional y planificada (cuestión imposible en AMBA) así como la recuperación cartográfica de los flujos naturales de las cuencas. La contemplación y respeto de estos mapas naturales ante la edificación, mejoraría notoriamente el poder de absorción y recorrido del esqueleto de las cuencas. De este modo no sería un territorio tan vulnerable a las inundaciones y así evitaríamos andar esquivando charcos, como hacemos cada tanto.

Como siempre sostenemos, los mapas son necesarios para abordar una temática social o urbana. No encontramos las cuencas metropolitanas bonaerenses mapeadas como insumos para trabajos o investigaciones. Va nuestro aporte.


sábado, 6 de mayo de 2017

Del campo metropolitano a su mesa. El Cinturón Frutihortícola platense

El Cinturón Futihortícola (CFH) platense o de La Plata es un territorio productivo que atraviesa tres partidos de la zona sur metropolitana. Esta zona de producción primaria, originalmente platense, se sitúa en el este y sudeste del partido de La Plata y en los partidos de Florencio Varela y Berazategui. El CFH ha mutado en extensión, composición, forma de administración de la tierra (y el régimen de propiedad) y colectivo productivo a lo largo de los años.


El CFH platense se configura como zona productiva concomitantemente al nacimiento de la capital provincial. Primero con colectivos de migrantes europeos (italiano y portugueses) que reproducían las formas de cultivo de sus lugares de origen. Con el tiempo las condiciones de producción del Cinturón fueron cambiando hasta conformar la morfología actual; una zona de producción y cultivo intensivo de hortalizas y frutas de año entero, bajo el formato exclusivo de invernáculos. El colectivo migrante que tomó la posta de los originarios y preformaron este manera de producir, son los bolivianos.




El CFH platense se encuadra dentro del Area Frutihortícola bonaerense, siendo su Cinturón más importante en producción. Según datos de un informe de la Facultad de Económicas (UNLP), en 2010 el CFH platense produjo 138.407 toneladas, siendo el 72% de la producción regional. Lo característico del Cinturón platense, es que se conjugan factores como los naturales y la planificación del territorio, en contra posición al desordenado desarrollo demográfico de la zona metropolitana bonaerense.

El CFH platense, por capacidad y ubicación estratégica (al 'margen' de AMBA), es el principal proveedor de frutas y hortalizas a la zona metropolitana central. Existe una alta probabilidad de que en cualquier verdulería de CABA o cualquier partido del Conurbano bonaerense, si compramos tomates, o acelga, éstas provengan del CFH platense.




En algunas publicaciones podemos leer que el CFH platense produce el 70% de las hortalizas y frutas que se consumen a nivel nacional. También, que en sus casi 300 km2 (trazando el cinturón como un área continua, sumando aglomeraciones y no necesariamente sólo el área cultivada -lo que nos daría una forma de archipiélago), está el 60% de los invernáculos del país. Es interesante el lugar que tiene el CFH platense, ubicado al borde de AMBA, dándole un papel estratégico.




Los informes nos dicen que los tomates (el 'tomate platense' es la estrella de la zona, hortaliza con una interesante historia, de la mano de los migrantes originarios del cinturón), el pimiento, la acelga, el alcaucil y el bróccoli, son los productos de mayor salida de esta zona. 
Más allá de la notoriedad que ha ganado con los años el CFH, es interesante observar algunos fenómenos que se desprenden de ello y que han ayudado a configurar su actual conformación. De una original estructura propietaria extensiva, hoy lo más común es la estructura arrendataria, modificando la relación de propiedad de la tierra.
Al ingresar los migrantes, principalmente bolivianos, le imprimieron una identidad de organización productiva (la agricultura familiar) que no era muy común en esta zona y que posee implicancias productivas como también contrarias a la legalidad (denuncias de trabajo infantil, esclavo, etc). Esta zona nuclea entre 10 mil y 12 mil trabajadores.
La modalidad de cultivo intensivo mediante invernáculos, además del efecto de maximizar la productividad de los campos (o unidades familiares, en algunos casos, medianas y pequeñas), genera un impacto ambiental al reducir la capacidad de absorción el suelo, aumentando la probabilidad de inundaciones. También, por la modalidad intensiva de producción, el uso de agroquímicos es elevado. 

Dos sucesos recientes tienen (o tendrán en el corto plazo) efectos sobre el Cinturón. Uno, es el temporal que ha sufrido la zona en febrero. Los daños causados a los productores han impactado en la comunidad agrícola pero también en la cosecha y en la capacidad de abastecimiento. El deterioro de las unidades productivas fue inmenso y todavía no hubo respuesta del gobierno provincial. Dos; hace unos días (2 de mayo), mediante el decreto 302/17, el gobierno nacional eliminó la Secretaría de Agricultura Familiar, área destinada a apoyar y fomentar a las pequeñas producciones agrícolas familiares, minifundistas, campesinas o indígenas. Otro golpe a las economías regionales. (https://notasperiodismopopular.com.ar/2017/05/03/gobierno-elimino-secretaria-agricultura-familiar/).

Como sucede en muchos temas, la información no abunda, es parcial, está atomizada y no está actualizada. Ni hablar de la disponiblidad. Buscando sobre este tema, pueden encontrarse informes, publicaciones y distintos tipos de notas. Es complejo consolidar y darle unicidad lógica (y empírica) a estos datos. Aunque la tarea es pesada, puede hacerse. Sin embargo, lo que no existe (por lo menos no disponible), es un trazado, un mapa de lo que sería el mentado CFH platense. Este post (y el mapa que está debajo), busca contestar una pregunta muy escuchada hace tiempo: "¿Sabés dónde se puede conseguir un mapa del Cinturón Frutihortícola de la Plata? No encuentro por ningún lado". Bueno, como siempre decimos, socializa es la tarea.





Algunos datos sobre el CFH platense para este post, fueron sacados de estos informes:
https://labs.ing.unlp.edu.ar/uidic/.../LOGISTICA%20DEL%20CHP%20(2016).pdf
http://www.econo.unlp.edu.ar/uploads/docs/caracterizacion_productiva_regional__la_plata___berisso___ensenada.pdf.
 http://revista-theomai.unq.edu.ar/NUMERO%2023/3_GarciaMati_35-53_.pdf.